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domingo, 28 de enero de 2024

La feria brilla en El Patio

Feriante, como panadero, como bombero...: FERIANTE. Un oficio como otro... Ese es el deseo de Concha, una de las veteranas feriantas que generosamente ha prestado su voz al armazón de este espectáculo, el quinto ya de El Patio Teatro. La compañía riojana dignifica al gremio en una pieza-homenaje donde rescata el ambiente de las antiguas barracas, las atracciones clásicas, las tómbolas, los puestos de tiro-pichón, el algodón de azúcar, las luces y el ruido... "Tienen más cuento que el tío de los caballicos", diría mi abuelo materno. Aunque esta vez el cuento no es ficción, sino documento: recoge las historias de trabajadores reales de las ferias mediante entrevistas grabadas, fotos de álbumes familiares, música popular de la época, con el habitual lenguaje de El Patio, entre lo poético y lo nostálgico, sostenido por la narración oral y objetual. Bajo la tesis de que todo el mundo tiene un vínculo con la feria, se asoman a la trastienda de quienes la hacen -e hicieron- posible, recorriendo a través de sus anécdotas algunos pasajes de la historia reciente de España.


Un momento del espectáculo Feriantes, de El Patio Teatro

Y es que ser feriante no es un oficio cualquiera, hace callo y se lleva a cuestas: es una forma de vida cada vez más amenazada por la precariedad y el desarraigo. Ellos trabajan cuando los demás se divierten, rulando sus atracciones de pueblo en pueblo en ese calendario azaroso de las fiestas patronales. La hambruna de la posguerra empujó a muchas familias españolas a echarse a los caminos para ganarse la vida, a montar una caseta, un cachivache... con lo poco que tuvieran.  De ahí que veamos tanta carretera en escena (ojalá también en gira). La idea de viaje, trashumancia o fugacidad está presente desde el inicio, y buena parte de la historia se desarrolla en cabinas de camión, remolques de juguete o el interior de una caravana. Uno de los cuadros más logrados de la función es el retrato de los distintos conductores cuya indumentaria cambia a la par que evoluciona el país (hitos sociales que se leen en toques como los adornos colgantes del espejo retrovisor -Naranjito, Cobi...-: ¡genialidad!) 

La coproducción propuesta por el CDN ha permitido a esta compañía abonada al pequeño formato engrandecerse literalmente en escena. No sólo por la oportunidad de crear un trasto escenográfico de mayor envergadura, sino por la ampliación del equipo. Izaskun Fernández dirige esta vez, y a Julián Sáenz-López se suman dos acertados fichajes: Alejandro López y Diego Solloa. Ambos actores, curtidos en más que tablas, aportan canciones en directo (de los Beatles a palos flamencos, saltando por entrañables temas de la Radio Orquesta Topolino), un ímpetu nuevo, y la grata habilidad de transmitir alegría.  


Un momento del espectáculo Feriantes, de El Patio Teatro

Con la viva voz como reclamo, anda jaleo, jaleo, y pasen y vean..., feriantes y titiriteros comparten caminos, vida ambulante, cercanía con el público, montaje y desmontaje. Todo es farándula y promete regocijo, aunque algunos crean que el teatro tiene más glamour. Una de las atracciones que la obra rememora es el Teatro Júpiter, un pabellón de autómatas que recorrió todo el país a mediados del siglo XX con gran éxito en las ferias, recientemente restaurado. Se anunciaba como Palacio de las maravillas del arte (no cabe más expectativa de ilusión en un título). Y es que "todos necesitamos un poco de fantasía para hacer la vida más amable". Tuvimos el honor de asistir a la función con algunos miembros de la familia Ducal, artífices del mítico teatro de marionetas. Su historia (como la de tantas otras estirpes de feriantes: los Romez, los Vila, los Zizines...) engarzada por varias generaciones, constituye una de las principales fuentes documentales de esta obra. No faltaron los guiños y los saludos cómplices al acabar.


Un momento del espectáculo Feriantes, de El Patio Teatro

Cada pieza que estrena El Patio es una declaración de amor al arte que profesan. Nos encanta  la humildad, el respeto y el entusiasmo con que se entregan a lo que tienen entre manos. Quizá este sea su espectáculo de mayor complejidad técnica por la exigencia rítmica y la profusión de utilería, recursos y transiciones. Más allá de los múltiples premios que atesoran desde sus inicios en 2010 o su participación en festivales de prestigio, su éxito se basa en ese boca-oreja agradecido que agota entradas cuando una función vale la pena de verdad. Con Feriantes sirven un capricho escénico que sabe a piscolabis y deja ganas de más, un collage de recuerdos de la infancia, un nuevo retablo de las maravillas que -con su ineludible dosis de idealismo-, no oculta las penurias de sus protagonistas.


viernes, 5 de marzo de 2021

Teatralia celebra sus bodas de plata con el público familiar

Teatralia, el Festival Internacional de Artes Escénicas para Todos los Públicos referente de calidad en la Comunidad de Madrid celebra este marzo sus bodas de plata fortalecido tras la abrupta suspensión de la pasada edición. A pesar de que algunas compañías recurrieron al streaming para salvar sus montajes, y hasta catorce espectáculos nacionales lograron reponerse durante el otoño, la herida del parón pandémico estaba aún fresca, por lo que la cita de 2021 invoca como nunca al poder sanador de la escena. Una programación ecléctica con cierto aroma filosófico diseminará por 27 municipios de la región las últimas tendencias de la escena española e internacional orientadas a público familiar, con especial protagonismo del circo, la danza contemporánea y los títeres. Una fabulosa ocasión para que pequeños y mayores disfrutemos juntos del mejor arte escénico, con júbilo y seguridad.

Un momento del espectáculo HUBO, de El Patio Teatro. Foto de Clara Larrea

Teatralia cumple un cuarto de siglo. Hasta 800 compañías han pasado por la Comunidad de Madrid en estos 25 años, según apuntaba la consejera de Cultura y Turismo, Marta Rivera de la Cruz.  En esta edición especial -tanto por el aniversario como por las circunstancias de la pandemia-, cobra aún más valor el esfuerzo colectivo de la organización y de las compañías participantes, que traen un total de 29 obras de disciplinas diversas, procedentes de siete países, de las que se van a representar más de cien funciones entre el 5 y el 28 de marzo.

Un festival inclusivo, que se define para todos los públicos en el sentido más amplio, lo que significa que apunta a todas las franjas de edad, pero también que integra a personas con discapacidad, reservando sesiones con intérprete de lengua de signos española, sistema de audiodescripción y programas de mano elaborados con códigos de comunicación accesible. 

Un momento de Les Madeleines de Poulpe. Foto de A.Veldman

El muestrario es interdisciplinar y de lo más atractivo. La directora del certamen, Lola Lara, subraya que estamos en un momento muy especial de la creación: "hay obras que se tenían que haber estrenado en 2020, pero por razones de la pandemia no pudo ser, y llegan a 2021 muy ensayadas, muy bien armadas". 
Por afición y devoción querríamos verlo todo; a continuación haremos un repaso de las propuestas más interesantes que no hay que dejar escapar.

Vocación internacional

Entre lo más destacado de la escena exterior, está el estreno en España de Juventud, del creador de origen argentino Nicanor de Elia, un sorprendente espectáculo que fusiona la danza contemporánea con las artes malabares en una suerte de circo futurista (en la Sala Negra de los Teatros del Canal)

Un momento de Juventud, de Nicanor de Elia. Foto de Francis Rodor

También en los Teatros del Canal, pero en la Sala Roja, se instalará un descomunal artilugio en el que la compañía francesa Bivouac bailará casi en el aire su particular indagación en el imaginario de la física cuántica con Percepciones, haciéndonos viajar de lo mayúsculo a lo minúsculo.

Otra compañía de circo francesa, Kadavresky, nos trae un espectáculo "tan absurdo como su título", en palabras de Lola Lara: Las magdalenas de pulpo, donde se hacen acrobacias con esquíes. Asombrosa receta con aroma cabaretero.

Y un artista excepcional que visita este año Teatralia es el musicólogo portugués Paulo Lameiro, referente de la música en vivo para la primera infancia. Llega con su concepto del escenario como nido y sus emblemáticos Conciertos para bebés, aunque es música electrónica que pueden disfrutar todos los públicos.

Mirada interior

Entre las primeras delicias autóctonas que degustaremos se encuentra Hubo, la segunda producción de El Patio Teatro, joya poética llena de encanto que desenterrará sus raíces en La Sala Mirador y en el Corral de comedias de Alcalá de Henares. Una pieza de cámara que habla sin palabras de la pérdida, la soledad, la memoria y el arraigo. Un homenaje a los pueblos, al mundo rural y a las personas que lo habitan. Temática especialmente sensible en la actualidad, que fue Premio FETEN al mejor espectáculo de títeres en 2019.

Un momento de Ikimilikiliklik (Mi pequeña), de Marie de Jongh. Foto de Pío Ortiz

Y otro Premio FETEN que celebra los títeres y el teatro de objetos es Nube Nube, de Periferia Teatro, que recalará en La Casa Encendida y en el Teatro Tyl-Tyl de Navalcarnero. Inspirada en el cuento de  La sirenita de Andersen, revisa lo que somos capaces de hacer para querer y que nos quieran.

El reconocido titiritero zaragozano Javier Aranda continúa girando sus manos y colmándolas de Vida. Increíbles requiebros de muñeca ahondan con humor en el implacable paso del tiempo. Una desternillante provocación ante la que no cabe la impasibilidad.

Marie de Jongh nos trae una de brujas conjurando a los miedos con su innombrable Ikimilikiliklik, Mi pequeña. Causó furor en FETEN alzándose con el Premio al mejor espacio escénico en la edición de 2020. Después de las aclamadas Amour e Izar, por fin podremos ver este montaje en Madrid.

Un momento del espectáculo Vida, de Javier Aranda. Foto de Hugo Falcón

La Baldufa Teatre, flamante Premio Nacional de Teatro para la Infancia y la Juventud 2020 ofrecerá dos espectáculos en distintas plazas de la Comunidad: Bye Bye Confetti, y La fábula de la ardillasu último proyecto, que integra un gran piano de cola en la escenografía y está dirigido por Jokin Oregi, uno de los directores españoles de obras infantiles más acreditados.

Un momento de La fábula de la ardilla, de La Baldufa Teatre. Foto D. del Val

Aparte de los estrenos y novedades, este año se hace un guiño al pasado rescatando ciertos títulos que en su momento tuvieron un significado particular en la historia del festival, como la multipremiada El Gato Manchado y la Golondrina Sinhá de El Retablo, o Las aventuras de Huckleberry Finn, de la veterana compañía Ultramarinos de Lucas (reciente Premio ASSITEJ España)

Son sólo algunas de la cuidada selección de creaciones que habitarán los teatros madrileños durante las próximas semanas. Teatralia persiste en su afán por favorecer los primeros encuentros del público más joven con las artes escénicas. Aceptemos la invitación. Llenemos de familia los teatros.
Todos los detalles sobre fechas, horarios, entradas..., en la web del festival.

viernes, 17 de marzo de 2017

Deambulantes, homenaje teatral a Gloria Fuertes en el centenario de su nacimiento

'Los niños que leen poesía se aficionan a la belleza del lenguaje 
y seguirán leyendo poesía toda su vida...' 
Gloria Fuertes

Este año 2017 celebramos el centenario del nacimiento de Gloria Fuertes, la escritora de los cuentos enanos, los versos fritos, el hada Acaramelada o el Diccionario estrafalario. Su poesía, tan teatral, tan jugable, y tan para todos, ha inspirado el trabajo de varias compañías orientadas al público infantil, como Teatro de Malta, que ya presentó en Teatralia su espectáculo Alegría, palabra de Gloria Fuertes. Ahora puede verse en los Teatros Luchana de Madrid -coincidiendo con el ciclo Mujeres en la escena-, Deambulantes, o la verdadera historia de la poeta errante (domingos de marzo), una obra de texto con interpretación musical en vivo, plagada de rimas, acertijos, trabalenguas y juegos de palabras, ideada por La Cantera exploraciones teatrales, que supone una excelente manera de acercar a los más pequeños a la poesía. Será inevitable salir de la función hablando en pareados... (y casi también, ir a la librería o a la biblioteca más próxima a hacernos con una antología de la autora homenajeada).

Una escena de Deambulantes (La Cantera)

Una historia de búsqueda inspirada en la vida de la autora

Violeta y Berta son dos vendedoras ambulantes de objetos disparatados que -a pesar del empeño que le ponen a la causa-, no venden nunca nada. Berta crea todo tipo de inventos extravagantes, y Violeta trata de encontrar su verdadera vocación probando suerte en distintos trabajos (como contadora de huevos o aviones de papel, transcriptora de cartas...). Un día Violeta recibe de su tía Calixta un insólito regalo: una máquina de escribir gracias a la cual su imaginación se disparará y ya no podrá parar de teclear y rimar con todo lo que encuentra a su alrededor. Finalmente, deciden ir de pueblo en pueblo compartiendo sus poemas, rimas, fábulas y adivinanzas, que es lo que realmente les apasiona. Deambulantes combina la actuación, el teatro con objetos y la música en directo para contar una entrañable historia que fomenta valores como la amistad y el trabajo en equipo, a la vez que potencia el desarrollo de las capacidades e inquietudes personales.


Vídeo promocional de Deambulantes (La Cantera exploraciones teatrales)

Poesía, música y teatro enlazados

A partir de una buena idea, con un material dramático muy rico y otros buenos mimbres, se articula un trabajo esmerado que desborda amor al asunto que se trae entre manos. El espacio escénico, constituido por una especie de carromato que se convierte en todo, unas pizarras garabateadas, el íntimo rincón de la escritura y la presencia continua de las dos músicas, integradas perfectamente en el devenir de la historia, logra crear una atmósfera de alegría permanente. Los elementos poéticos unidos a la banda sonora original, compuesta de forma específica para la ocasión y con un tema principal verdaderamente carismático, generan todo un universo de sonoridades a lo largo de la función.

Funciona como un dinamizador el momento en que se pide la participación del público para acometer las 'instrucciones de uso' de una 'máquina de viajar', que requiere de la energía y los gestos cómplices de los niños asistentes para ponerse en marcha. Y resulta hermoso y festivo el final, cuando las dos deambulantes salen de escena y regalan al público octavillas con poemas de Gloria que todos nos llevamos a casa como si fueran tesoros.

Aunque la propuesta es una oda a la capacidad de imaginación con los recursos más sencillos, sería interesante buscar algún efecto visual más potente, que atrape y mantenga la atención de los niños más pequeños más allá del texto y la acción. Hay cierto exceso de convenciones teatrales, que los mayores asumen, pero no aún muchos niños que -tal vez- se acercan por primera vez al teatro. El afán por mantener un ritmo ágil conlleva en ocasiones demasiada velocidad en la sucesión de escenas y frases, que pueden dificultar la comprensión, por lo que la obra llegará mejor al público infantil más mayorcito; a los más peques les puede costar entender la trama, algunos conceptos y bastantes de los diálogos.

Cartel de Deambulantes

Otras actividades al hilo de la efeméride

La Fundación Gloria Fuertes apoya esta producción de La Cantera exploraciones teatrales y es impulsora, además, de otras actividades que pretenden dar visibilidad y poner en valor el legado de esta gran escritora, como la Retrospectiva Gloria Fuertes 1917-1998 en el Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa de Madrid. La exposición realiza una recorrido por su vida y su obra a través de fotografías, poemas, documentos y objetos personales de la conocida como "la poeta de los niños", y será el centro alrededor del cual gravitarán los actos del centenario. La muestra se podrá visitar hasta el 14 de mayo de 2017 con entrada gratuita, de martes a domingos y los días festivos de 10:00 a 21:00 h.
El Ayuntamiento tiene previsto además habilitar un espacio con el nombre de la autora en la próxima Feria del Libro de Madrid y desarrollar alguna actividad dentro de los Veranos de la Villa 2017.

Cartel de la exposición dedicada a Gloria Fuertes en el C. C. de la Villa

Por otro lado, la dramaturga, investigadora y especialista en teatro y poesía para la infancia y la juventud Itziar Pascual, participa en el ciclo de conferencias "Mujeres en las artes" que organiza la Comunidad de Madrid. El miércoles 22 de marzo, a las 19 h., ofrecerá en el salón de actos de la Real Casa de Correos (Puerta del Sol, 7) la charla Versos con faldas. Gloria Fuertes y las poetas españolas para la infancia y la juventud, hoy (2000-2015). Una oportunidad estupenda para conocer y comprender mejor la obra de Gloria Fuertes y la de otras mujeres poetas contemporáneas imprescindibles que dedican sus creaciones a los niños y niñas.
(Podéis leer la entrevista que le realizó MAMÁ TEATRIZ a Itziar Pascual hace unos meses aquí).


DEAMBULANTES o la verdadera historia de la poeta errante

Producción: La Cantera Exploraciones teatrales

Lugar: Teatros Luchana (calle de Luchana, 38, Madrid)

Funciones: Domingos 2, 9, 16, 23 y 30 de abril a las 12:00 h.
Duración: 55 minutos aprox.

Edad recomendada: de 5 a 12 años.

Dramaturgia, dirección y actuación: Marta Cuenca / Esther Ramos
Creación musical y música en vivo: Inma Claudio / Ana Cuenca Ramón
Supervisión artística e Iluminación: Jorge Sánchez

viernes, 9 de diciembre de 2016

Yo soy La Locura, delicioso cuento con títeres y música antigua de la compañía Claroscuro

Yo soy La Locura es un hermoso espectáculo de títeres, máscaras, y música antigua, creado por la compañía de teatro hispano-canadiense Claroscuro, que podrá admirarse el domingo 11 de diciembre en la Sala Verde de los Teatros del Canal dentro del programa 'Suite Iberoamérica'.
Los Teatros del Canal ofrecen una jornada de puertas abiertas para todo el público, con propuestas de música, danza, circo o teatro para celebrar el arte y la creatividad del otro lado del Atlántico, entre las que destaca este delicioso cuento, que mantiene una estética de teatro negro inspirada en la luz de las velas, e integra música española y americana del Siglo de Oro. 
El espectáculo obtuvo una mención especial del jurado en el Certamen internacional de barroco infantil del Festival de teatro clásico de Almagro en 2012, "por la recuperación del patrimonio musical barroco, el rigor expresivo y la delicadeza poética de sus imágenes", y ha sido candidato a la mejor Ópera para jóvenes audiencias en 2015. Se realizarán dos pases de entrada gratuita, uno a las 13:35 h., y otro a las 16:15 h.

Un momento de la representación de Yo soy La Locura


Yo soy La Locura es un viaje mestizo de ida y vuelta, un cuento para niños y adultos, una reflexión sutil que utiliza la capacidad del espectador para emocionarse ayudado por la magia de los títeres, que se convierten en materia viva durante casi una hora para contarnos una historia de amor, entrega, aventuras y sacrificio. El público podrá escuchar las músicas españolas de nuestro Siglo de Oro interpretadas con criterios e instrumentos de la época, y revividas con su sabor folclórico y cortesano, desde la ternura hasta la crudeza, desde el llanto hasta la alegría desbordada, dejándonos mecer por la bruma del tiempo.

La historia


La Locura, un ser mitológico que mueve las pasiones de los humanos, aparece en escena para contarnos la historia de amor -sobre un fondo bélico- entre Manuel, titiritero español que acompañó a Hernán Cortés en la conquista de América, y Zyanya, una joven mujer azteca, basada en un hecho real.
Francisco de Paula, uno de los creadores de la función, subraya que los españoles somos mestizos; que la cultura española, nuestra manera de sentir, de ser y de vivir jamás volvió a ser la misma después de mezclarse con la americana.

Un momento de la representación de Yo soy La Locura


Repertorio de la obra


1. Henri du Bailly (-1637)
Yo soy la locura
2. Anónimo (Texto de Lope de Vega)
Lamento de Belisa
3. José Marín (1618-1699)
Ojos pues me desdeñáis
4. Anónimo - Jaime Baltasar Martínez de Compañón (1737-1797)
Cachua a voz y bajo al nacimiento de Christo Nuestro Señor
5. Anónimo Quechua - Juan Pérez de Bocanegra (1598 - 1631)
Hanacpachap cussicuinin
6. Gaspar Sanz (1640-1710)
Caballería de Nápoles
7. Luis de Milán (ca.1500-ca.1561)
Pavana
8. Gaspar Sanz (1640-1710)
Dos trompetas de la Reyna de Suecia
9. Gaspar Sanz (1640-1710)
Lantururú
10. Juan Hidalgo (1614-1685)
(Texto de Agustín de Salazar y Torres)
¡Ay, que me río de Amor!
11. Martin y Coll (1680-1734)
Diferencias sobre La Folía
12. Anónimo
No hay que decirle el primor
13. Anónimo (Texto de Calderón de la Barca).
Quiero y no saben que quiero
14. Anónimo -Jaime Baltasar Martínez de Compañón (1737-1797)
Cachua Serranita
15. José Marín (1618-1699)
Qué dulcemente suena
16. Santiago de Murcia (1673-1739)
Preludio
17. Henri du Bailly (-1637)
Yo soy la locura

Todas estas obras aparecen en la función interpretadas con instrumentos de época: viola da gamba, guitarra barroca, tiorba y charango, flautas renacentistas, corneto, quena, percusión y la delicada voz de la soprano Verónica Plata. La peculiaridad es que aquí la música no acompaña a la obra de teatro, como suele ser habitual, sino que las propias letras de las canciones van contando la historia. Algunos de los textos principales pertenecen a Lope de VegaCalderón de la Barca.

Los músicos acompañan la acción de Yo soy La Locura

La vivencia


Infinita fortuna tendrán aquellos que logren deleitar sus sentidos con Yo soy La Locura. Homenaje a los titiriteros; historia bella, triste, nostálgica, contada con lirismo y delicadeza... Retablo de ceremonias plagado de detalles; qué mimo y cuidado al tratar a las marionetas, qué estampas de bodegón. Riguroso trabajo documental presentado con total naturalidad por siete profesionales increíbles, músicos y actores, que nos llevan a recuperar la capacidad de asombro. Qué dulcemente suena..., ¡ay, que me río de Amor! Claroscuro nos descubre en esta función la magia del meta-títere.


YO SOY LA LOCVRA (Cuento musical)
Compañía Claroscuro

Teatros del Canal (Sala Verde) Programa 'Suite Iberoamérica'
Domingo 11 de diciembre de 2016

Horarios: Dos pases, a las 13:35 y a las 16:15 h.
Edad recomendada: Espectáculo familiar. A partir de 8 años.
Duración: 55 minutos.

*Entrada gratuita (se podrán recoger una hora y media antes en la puerta de la sala)

Equipo artístico:

Guión: Julie Vachon con la ayuda de Francisco de Paula Sánchez y Mathieu Leroux
Dirección: Francisco de Paula Sánchez y Julie Vachon
Títeres: Julie Vachon y Francisco de Paula Sánchez
Música: Verónica Plata (soprano), Miguel Ángel Jiménez (guitarra barroca, tiorba y charango), Calia Álvarez/Aurora Martínez Piqué (viola de gamba), Luis Vives (percusión), Fernando Pérez Valera (flautas dulces y cornetas).

viernes, 2 de diciembre de 2016

The Funamviolistas: trío de cuerdas en Sol mayor, en los Teatros Luchana

Entre la marabunta de espectáculos de corte familiar que se agolpan en las carteleras en estas fechas prenavideñas, merece la pena destacar la proeza escénica que realizan las tres artistazas componentes de Funamviolistas, un caramelo de función que fue Premio Max al mejor espectáculo revelación en 2014, y que acaba de reestrenarse en los Teatros Luchana de Madrid después de haber agotado entradas en Matadero la temporada pasada. Una de esas delicatessen que saben a poco, y que cuando acaban desearías volver a disfrutar.

Imagen de Funamviolistas

¿Teatro musical o música teatralizada?, ¿fábula cómica o concierto dramatizado? No queda claro dónde está el límite en esta propuesta, pero tampoco importa, cuando es patente que la sinergia entre géneros y disciplinas sirve para alumbrar nuevos lenguajes escénicos tan gozosos y flamantes, desde el virtuosismo técnico, la expresividad gestual y la comunión de sonido y movimientos.
The Funamviolistas, tres chicas sobre un escenario apenas atrezzado por un banco y una farola, estampa nostálgica y solitaria de cualquier parque donde se entrecruzan tres caminos. Tres chicas cuya historia se cuenta sin palabras, porque sus voces son la música que brota de un violín, una viola y un contrabajo. Y sin embargo, nada de clásicas. Tres auténticas bestias escénicas (Ana Hernández / Sarai Pintado, Mayte Olmedilla, Lila Horovitz) que son instrumentistas, cantantes, actrices-cómicas, bailarinas y casi acróbatas, para quienes su instrumento es una prolongación de ellas mismas, otro miembro orgánico o trozo adherido de piel.

Según avanzan las escenas, resulta cada vez más asombroso verlas tocar de todas las maneras posibles, casi a oscuras, en posturas ciertamente insólitas, a la vez que caminan, bailan, compiten, se interpelan... Los instrumentos son personajes con los que exploran otros usos, más allá de extraer melodías de ellos: son soportes, camastros, maletas, amantes, sombrillas, objetos de percusión...

Imagen de Funamviolistas

En palabras de su director, Rafael Ruiz, "las Funamviolistas crean ilusiones sin chistera, sonrisas sin nariz roja, y hacen temblar al público sin alambre, subidas al gesto y las cuerdas de sus violines". Y es verdad que el público tiembla; de la emoción de sentir nacer la música en directo -lo que acostumbramos poco-; de asistir a la pura creación en el instante; de experimentar la belleza que no se puede apresar.

Inolvidables la escena del can-can en calzas, la disputa entre el violín y la viola, el solo en puntas de la violinista rescatando el tema principal de la película In the mood for love, la sensualidad del tango bailado con el contrabajo como pareja,  la barcarola asida a un mástil que sobrevive a la tormenta, el arrebatado Invierno de Vivaldi (imposible no incluirlo en repertorio), la impactante imagen final de las tres siluetas retroiluminadas derrochando pasión a ritmo de Piazzolla...

Imagen de Funamviolistas

Bien resueltas, a pesar de su dificultad, las transiciones entre escenas, con oscuros que sobrecogen e invitan al aplauso. Quizá convendría poner más atención en el trabajo de suelo, especialmente en proscenio, ya que la inclinación del graderío de la Sala 2 de los Luchana, que antes fuera un cine, resta un poco de visibilidad, por lo que sería más adecuado intentar llevar ciertas partes de la acción algo más hacia el fondo del escenario.

No os perdáis este espectáculo colmado de talento, ideal para compartir en familia; tanto adultos como chavales acabarán maravillados, con ganas de ver más teatro, y de escuchar o aprender más música. Será inevitable salir tarareando la cancioncilla de Les triplettes de Bellville, que las Funamviolistas adoptan como himno...



THE FUNAMVIOLISTAS

Comedia musical
Teatros Luchana (Calle Luchana, 38, Madrid)

Dirección: Rafael Ruiz
Reparto: Ana Hernández / Sarai Pintado (violín), Mayte Olmedilla (viola), Lila Horovitz (contrabajo)

Fechas: 5 y 19 de febrero; 11, 12 y 19 de marzo de 2017.
Horarios: 19:30 h.

Duración: 75 minutos
Edad recomendada: Espectáculo familiar. Fascinará a chicos/as a partir de 9 años, o incluso algo menores, si están muy motivados con la música.

jueves, 20 de octubre de 2016

La cueva de Clan de Bichos: teatro negro, muppets, y humor canalla en el corazón de Madrid

Un rincón mágico

Una de esas cavas que parecen lugares encantados, tan típicas del Madrid de los Austrias, que en otros tiempos fuera vaquería, o floristería..., está poblada ahora por otros habitantes: los títeres y objetos convertidos en personajes por la compañía Clan de BichosSusana Sánchez e Ismael Moreno son una pareja que lleva más de diez años de andadura juntos, y dos como regidores de este singular espacio. Tienen el valor de ser dos teatreros incombustibles que lo hacen todo ellos mismos: Ismael es escenógrafo, artesano de marionetas, transformador de objetos; Susana es guionista, compositora, relaciones públicas... Ambos productores, actores, titiriteros.

Ella, además, tiene un don para tratar con la gente y crear un ambiente amigable para todos: recibe al público, bromea con ellos, acomoda a pequeños y mayores sacando el máximo partido al recoleto espacio, presenta..., y tiene detalles (como preocuparse de que los niños que lo necesiten vayan al baño antes de que comience la función), que hacen que cualquier visitante de La Cueva se sienta como en su casa: la cercanía es tal que se transmite la entrega, el mimo y el amor que hay detrás del proyecto. Merece la pena escaparse a conocerles.

La cueva de Clan de Bichos

Nos muestran el lugar como teatro irreal; por un lado, es un guiño a su vecindad con el templo de la lírica madrileño, el Teatro Real (que se encuentra a apenas tres minutos), y aunque es bastante más modesto, no le faltan sus decorados en grana y oro; por otro, porque buena parte de sus montajes se sustentan en un imaginario surrealista y absurdo.

Agugutata: el primer parto en directo de un bebé títere

Nos aseguran que allí se cuentan historias espeluznantes, como la de la familia... Y es que la propuesta de los domingos es realmente original: en Agugutata asistimos a un acontecimiento insólito: el primer nacimiento en directo de un bebé títere. Una divertida oda a la familia, sobre todo a los agotados papás, a quienes se advierte de la que se les viene encima cuando deciden tener a sus cachorrillos humanos.
Los simpáticos títeres tipo muppets (de guante y varillas, construidos en materiales blandos y con enormes ojos saltones) sumados al uso de proyecciones, logran un conjunto visual muy potente que capta pronto la atención de los niños.

Mamá títere con sus dos hijos

Chusa, la hija/hermana mayor va presentando a los personajes principales, entre ellos Papá Popoto, un filósofo y rockero (en paro, por supuesto) que sufre en sus propias carnes los síntomas del embarazo, mientras la futura mamá está fresca como una rosa... Esa tarde, por primera vez en mucho tiempo, los padres consiguen dejar a la niña con los padrinos/abuelos para poder ver juntos a solas la final de la Liga de los Cuentos, que se juega entre el 'Atlético de Malvados' y 'Los más guays del Reino', retransmitida por un comentarista que le da unas cuentas patadas a algunos tópicos de los personajes de cuento tradicionales. Al final del partido, de pura emoción, la madre rompe aguas y hay que salir pitando para el hospital.

Nada de semillitas, ni historias de París, ni encargos a la cigüeña...; aquí hay una voluntad expresa de contar a los niños la realidad de un parto: la barriga gorda, los pujos, el papá ausente porque no encuentra aparcamiento, la oxitocina por las nubes, la subida de la leche...

Papá Popoto

Bravo por la viveza de los actores a la hora de improvisar: genial el momento en que uno de los manipuladores, fuera del teatrito, intenta quitarle a la mamá un pelo -hilo de lana- de la cara que le restaba expresividad, provocando el enfado de la títere porque estaba interrumpiendo su solo de bienvenida al bebé, "El día más feliz de mi vida", un momento muy tierno y emotivo (¡ay, estos titiriteros, siempre fastidiando...!).

La propuesta tiene un discurso inteligente para los niños, a la vez que está plagada de toques humorísticos bastante gamberros que buscan la complicidad de los adultos, hacerles recordar el niño que fueron...
Los títeres salen y entran de la historia continuamente para dirigirse al público (sorprende que se aprendan los nombres de los pequeños espectadores) y les animan a cantar, a repetir las coletillas, e incluso a participar en la acción.

Un punto a favor merece también el aspecto musical: todas las canciones están compuestas expresamente para la ocasión y (salvo el número final) son interpretadas en directo, con gracia y afinación, a la vez que se manipulan un sinfín de personajes y trastos.
En suma, una fábula dinámica y entretenida, que da la impresión de que fluye según la atmósfera que se genera, y varía en cada nueva representación.

El bebé títere

¿Con qué sueñan los bebés?

Este interrogante da pie a una parte muy distinta de la obra que se realiza con la técnica de la luz negra. Un tropel de figuras fosforescentes se van sucediendo ante la mirada atónita de los peques. Algunas de ellas guardan relación con el mundo de los bebés (un biberón, chupetes, una luna-mecedora...); otras, como monstruos variopintos, seres del mar, pájaros fantásticos, espirales hipnóticas, planetas cuya conquista se disputan Macintosh o Windows... resultan desconcertantes por lo inconexas y la falta de dramaturgia. Un derroche de formas y efectos que recuerda a la borrachera onírica de Dumbo en el clásico de Disney, y que en algún momento llega a abrumar por el exceso. El sueño se torna pesadilla esquizoide y el bebé se despierta; alguien tendrá que venir a cantarle una nana.

Imágenes y objetos del sueño del bebé

Imágenes y objetos del sueño del bebé

Sería curioso ver algún día la función que se esconde detrás de la función: asistir al baile de objetos, cambios de lado, manos que se visten y desvisten, posturas imposibles, ordenado caos, baño en sudor de los dos manipuladores..., desde el revés del telón.
Al final de la obra, a los niños más mayorcitos se les invita precisamente a descubrir los entresijos del teatro negro pasando un momento a la trastienda, y toda la familia puede acercarse a tocar a los muñecos, y a hacerse fotos con el bebé títere, protagonista de la historia.


"Agugutata"
Una creación de Susana Sánchez e Ismael Moreno

Teatro: La Cueva de Clan de Bichos
Dirección: C/ Mesón de Paños, 2 (Metros Ópera/Sol)
Funciones: Domingos a las 12:00 y a las 17:00 h.
Duración: 60 minutos.
Edad recomendada: Espectáculo familiar. Los niños a partir de 4 años lo entenderán mejor.
(Imprescindible reservar)